La infertilidad masculina puede estar influenciada por varios factores, que pueden afectar la producción, la función o el transporte de los espermatozoides. Algunos de los factores más comunes incluyen:

• Problemas en la producción de espermatozoides (oligospermia o azoospermia): Puede deberse a condiciones genéticas, problemas hormonales, infecciones testiculares, exposición a toxinas ambientales, o efectos secundarios de ciertos medicamentos.
• Problemas de calidad espermática: La calidad de los espermatozoides, que incluye su movilidad y morfología, es esencial para la fertilidad. Factores como el estrés, la obesidad, el tabaquismo y el consumo de alcohol pueden afectar negativamente la calidad del esperma.
• Obstrucciones en el tracto reproductivo: Bloqueos en los conductos deferentes o en el sistema de transporte de los espermatozoides pueden ser causados por infecciones, cirugías o anomalías congénitas.
• Problemas hormonales: Desequilibrios hormonales, como bajos niveles de testosterona o problemas con otras hormonas involucradas en la producción de esperma, pueden afectar la fertilidad masculina.
• Problemas genéticos: Anomalías genéticas, como la microdeleción del cromosoma Y, pueden contribuir a la infertilidad masculina.
• Infecciones: Infecciones en el tracto reproductivo, como epididimitis o prostatitis, pueden afectar la producción y calidad del esperma.
• Varicocele: Una dilatación de las venas en el escroto puede elevar la temperatura testicular, lo que afecta negativamente la producción de espermatozoides.
• Exposición a sustancias tóxicas: La exposición a productos químicos, radiación, pesticidas y otras sustancias tóxicas en el entorno laboral o cotidiano puede afectar la fertilidad masculina.

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